lunes, 23 de junio de 2014

Muerte de las abejas

Se comenta que cuando desaparezca la última abeja del mundo el ser humano tendrá sólo cuatro años de vida. Se cree que fue Albert Einstein quien lo dijo aunque algunos no se ponen de acuerdo en la cita; lo cierto es que la frase puede no ser mentira.
Desde el 2006 los apicultores empezaron a notar que las abejas estaban desapareciendo extrañamente, los científicos lo llamaron “Trastorno del Colapso de las Colonias”. Las abejas morían sin ninguna razón entendible y en la mayoría de los casos lo hacían sin dejar rastros, simplemente desaparecían. En EEUU los apicultores perdieron hasta un 90% de ellas.
Lo mismo ocurría en Francia, India, Inglaterra, Bégica, Italia, Alemania, Suiza, España, Grecia, Eslovenia, Austria y Holanda y en varios países más del continente europeo. Con los años esa extraña enfermedad se extendió al resto del mundo, a Brasil, México, Argentina, entre otros más de Latinoamérica.
Había muchas teorías sobre la causa desconocida, entre ellas estaba que las señales de teléfonos inteligentes confundía el vuelo de los insectos hasta que se perdían y morían sin poder llegar a casa, afirmaron conspiraciones gubernamentales o incluso extraterrestres.
Sin embargo el 27 de marzo del 2014 un estudio de Harvard, en Estados Unidos, confirmó lo que científicos europeos han estado diciendo por años: la causa principal es los insecticidas (neonicotinoids) usados por las grandes corporaciones Monsanto, Syngenta, Bayer, Dupont y sus productos. Empero las compañías se niegan a aceptar su culpa y el gobierno de los Estados Unidos aún no prohíbe el uso de estos químicos.
Sea de quien sea la culpa, participe o no el gobierno o individuos el problema, y lo realmente preocupante fueron las declaraciones por el gobierno de EEUU de que la tasa de muertes en las abejas es tan alta que las pocas restantes son insuficientes para que prevalezca la especie, esto es: las abejas están a un par de años de extinguirse. Desaparecer para siempre.
Lo altamente sorprendente y que llama tanto la atención es que si bien las aves, murciélagos, insectos, viento y agua son los factores para la polinización, en las abejas recae el peso principal participando hasta en un 80% de la polinización mundial. Esto significa que los demás vectores, con la muerte de las abejas, no podrán darse abasto y la polinización decaerá hasta ser sólo el 20%. Lo que significa que las frutas y verduras se reducirán tangiblemente y muchas especies de ellas desaparecerán tales como las manzanas, mangos, kiwi, alfafa, fresas, cebollas, frijoles, cerezas, el café, limones, melones, cocos, brócoli, papaya, el sésamo, tamarindo, la cocoa, vainilla, tomate, entre muchas.
Habrá quién diga que no le importa o que no le gustan las frutas ni las verduras y comerán carne; lo que no se ponen a pensar es que los animales--poseedores de esa carne a la que se refieren--sí comen frutas y verduras o animales que las comen y afectará de una forma u otra.
Y es que las abejas tienen un valor sumamente importante en la cadena alimenticia, tan crucial que su desaparición moverá todo de una manera radical, drástica y en proporciones bíblicas.
La comida escaseará en poco tiempo, los precios de las misma subirá enormemente y con ello vendrá la muerte de innumerables animales y al final golpeará de  una manera cruel y despiadado al ser humano.
Yo no sé en realidad si tendremos sólo 4 años de vida como especie. Tan poco sé qué tan avanzados científicamente está la humanidad, si la comida artificial logrará extenderse a todo el mundo o si estamos perdidos. Lo que sí sé es que si efectivamente las abejas se extinguen el golpe nos vendrá pronto y será duro que incluso aquellos que ahora se ríen o lo niegan lo sentirán en las venas.
Tal vez la humanidad como tal no desaparezca, tengo confianza en ellos, han prevalecido con el tiempo y la naturaleza misma halla la manera de sobrevivir. Con la muerte de estos insectos alguien más tomará su lugar, se podrá encontrar una manera artificial de polinizar o quizá se fabrique comida sintética suficiente. No lo sé. Pero las cosas cambiarán, la naturaleza dejará de ser como la conocemos, los espacios verdes disminuirán, las flores dejarán de adornar los parques y jardines, los cultivos quedarán secos, animales morirán, gente sufrirá y las nuevas generaciones, los sobrevivientes (en caso de que así suceda) ya no conocerán este mundo y vivirán en lugares sacados de películas de ciencia ficción con atmósferas apocalípticas.
Les platicaremos sobre las frutas, su gran sabor y belleza; la hermosura de las flores y los árboles y no podrán entendernos y nosotros lloraremos en un futuro cuando sea algo real porque ahora no lo vemos. Nadie se da cuenta y no pasa de ser una nota que se olvidó en medio de los vitoreos del mundial o las protestas a la presidencia
Pero si esto sucede, si efectivamente las abejas desaparecen en un par de años… ni siquiera tengo palabras para referirme a ello, pero será impresionante.


http://livefreelivenatural.com/honeybee-death-rate-currently-high-survival-species-crucial-food/
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http://es.wikipedia.org/wiki/Problema_de_colapso_de_colonias#Escala_del_problema

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